Con una amplia trayectoria en la fuente de sucesos… El reportero de Venevisión, Santiago Gutiérrez ha sabido conjugar sus conocimientos periodísticos con el derecho y la criminología

en su nueva obra “Al filo del delito”, un texto que lanza al mercado tras cinco años de la publicación de su primer libro que versa sobre la vida pública y privada del libertador, llamado “Bolívar: Guerrero, Humano y Don Juan”.

El periodista y abogado con postgrado en criminalística pone a disposición del público esta obra, con prólogo del reputado comisario Javier Gorriño, en la que analiza doce de los sucesos nacionales más impactantes, tales como el caso del El Inca Valero, de la modelo Marisol Da Silva Vieira, el asesinato de tres jóvenes de 14, 15 y 16 años perpetrado por Argenis Rafael Ledezma, a quien entrevistó y le proporcionó datos que nunca salieron a la luz pública. También se hace referencia a la toma de rehenes del Urológico San Román y la de Lomas del Ávila, la muerte del beisbolista Gustavo Polidor, el doble asesinato de Alsina Sánchez y su hija Oriana Monasterios, quienes fueron quemadas vivas en Parque Caiza; el asesinato que cometió Cybel Naime de 19 años por un gato; se plantea además la masacre de Kennedy, el caso del periodista Javier García, así como la muerte del reconocido actor Yanis Chimaras.

El texto fue bautizado el primero de abril en el Palacio de Gobierno de la ciudad de Valencia, en un acto que contó con la presencia del Gobernador del Estado Carabobo, Henrique Salas Feo, el tren ejecutivo, miembros del Colegio Nacional de Periodistas y el círculo de reporteros gráficos de la entidad.

Además el día jueves 07 de abril a las 6:00 p.m, el periodista presentará el libro en la Universidad Santa Rosa, y en el mes de mayo estará ofreciendo el texto en la  Universidad Santa María. Igualmente, “Al filo del delito” se puede adquirir en la librería El Marcador, ubicada en la Candelaria.

– ¿El libro será de ayuda para los estudiantes de comunicación social y para periodistas que estén comenzando?

– Sí espero que sea de mucha ayuda para los estudiantes y las escuelas de comunicación social. Es de mucha utilidad ya que allí se habla mucho sobre la terminología criminalística. Hago referencia a las consideraciones importantes que se deben tener en cuenta a la hora del manejo de la fuente de sucesos. También hago un perfil del reportero en general y del reportero de sucesos, enfocándome en las condiciones que debería tener un reportero en la actualidad, en un país que está hambriento de información. El reportero debe ir al ritmo que avanza el mundo y la tecnología. Un reportero de sucesos debe ser un investigador. El libro se hace en un contexto delincuencial que vive el país donde los índices de delito se han incrementado.

– ¿Los lectores recibirán, a través de tu libro, consejos para evitar ser víctimas de la delincuencia?

– Sí, no taxativamente, pero si hago referencia a lo que se debería hacer para evitar ser víctimas propiciatorias del delito. Hago referencia al secuestro express y tradicional, a no echar gasolina de noche, a evitar sacar dinero del telecajero, prever si alguien te siguió al llegar a casa, manejar con los vidrios arriba, entre otras cosas. El delincuente opera de manera sorpresiva para garantizar el éxito de su delito, por eso es importante seguir ciertos consejos para estar alerta y evitar ser víctimas. Para disminuir los índices de delincuencia el criminólogo diría que necesario activar una política criminal de atacar, prevenir y aplicar tratamiento, pero eso no es suficiente, en el país ninguna de las tres funciona. En Venezuela hace falta atacar a la delincuencia, pero no se hace de manera masiva e inteligente, para buscar equilibrio social. Estamos en una situación de indefensión.

– A tu criterio, ¿cómo se puede paliar la inseguridad?

– Comenzando a trabajar en todos los niveles, que los fiscales se aboquen a las investigaciones, que se terminen las comisiones para inculpar o no, hacer un trabajo arduo en las cárceles, porque los delincuentes en vez de regenerarse, se degeneran más, hay que poner a esa población ociosa a trabajar, a hacer actividades productivas para el país de las que puedan obtener un pago, y que luego puedan usar al salir de prisión. Es necesario atacar el consumo y el tráfico de estupefacientes y el consumo de alcohol con constantes operativos policiales, hay que llegar al fondo del problema y no seguir trabajando de forma superficial. En el país hay muchos abogados sin trabajo que pueden contribuir a combatir la delincuencia, hay que robustecer a los cuerpos policiales, con mejores equipos para la policía científica y mejores beneficios laborales. En mi libro comento los aportes que se pueden hacer, desde el punto vista de las autoridades, para frenar la delincuencia, un flagelo que afecta a todos los venezolanos.