La cantante está embarazada de cuatro meses y ya ha averiguado el sexo de su bebé: un niño. Mariah Carey tuvo que recurrir a un tratamiento de fertilidad para poder quedarse embarazada y hasta ahora se ha resistido

a dar más datos sobre su estado por superstición. El primer hijo de la artista nacerá en marzo y tanto ella como su marido Nick Cannon están preparando todo para su llegada.

Mariah Carey ha llevado su embarazo con mucha discreción y sin dar más datos de los necesarios a la prensa. Pero HollyBaby ha sacado a la luz el sexo de su bebé, un niño cuyo nacimiento se espera para el próximo marzo.

El motivo por el que la cantante no ha querido hacer declaraciones no es otro que la superstición. Mariah tuvo que someterse a un tratamiento de fertilidad para quedarse embarazada, por lo que parece temer que cualquier cosa que haga o diga pueda complicar su estado.

«Va a tener un niño, pero la razón por la que Mariah no quería decir nada es porque tiene 40 años y es supersticiosa», afirman fuentes de este medio. Eso sí, dentro de poco la cantante acudirá a las televisiones para aclarar todo cuanto ha callado hasta el momento.

«Aparecerá en el programa de Oprah Winfrey y en The View, así que tiene pensado anunciarlo pronto», continúa esta fuente.

Lo cierto es que el tratamiento de fertilidad debió de ser complicado para la cantante, pues fue «la razón por la que ha ganado tanto peso este año», y además la artista «dejó de beber en marzo o abril de este año», con lo cual parece estar esforzándose al máximo por que nada interfiera en la buena marcha de su embarazo.

Y mientras los meses pasan, ella y su marido Nick Cannon se dedican a decidir «si criar al bebé en Nueva York o Los Angeles». De momento ambos se encuentran viviendo en la capital californiana, en una mansión de 3.600 metros cuadrados con cinco habitaciones donde podrían establecer su núcleo familiar.