Un estudio determinó que la actividad física moderada durante el embarazo, podría mejorar el desarrollo cerebral de los bebés.


La actividad física ha demostrado sus ventajas para el cerebro de los adultos y también de los niños y jóvenes, pero hasta ahora ningún estudio había investigado si la práctica de ejercicio durante el embarazo extiende sus efectos beneficiosos al bebé en gestación.

Y este efecto podría tener un impacto duradero a lo largo de la vida del niño.

En este sentido, la Universidad de Montreal y el hospital infantil Sainte-Justine han presentado en el Congreso anual de la Sociedad Americana de Neurociencia un interesante estudio sobre el tema.

Según la investigación, con tan solo 20 minutos de ejercicio moderado tres veces por semana durante el embarazo se acelera el desarrollo del cerebro del recién nacido. Y este efecto podría tener un impacto duradero a lo largo de la vida del niño.

En análisis realizado por la Universidad de Montreal es “el primero controlado y aleatorio en humanos, que mide objetivamente el impacto sobre el cerebro del recién nacido del ejercicio realizado durante el embarazo”, explica el profesor Dave Ellemberg, que ha dirigido el estudio.

Aunque se aconsejaba a las mujeres gestantes que descansaran durante su embarazo, estas recomendaciones han cambiado por completo porque se ha visto que el sedentarismo aumentan los riesgos de sufrir complicaciones durante el embarazo. Señalando así que la actividad física reduce las molestias durante la gestión, facilita la recuperación después del parto y reduce el riesgo de obesidad en los niños.

Futuras madres participantes en el estudio, debían realizar por lo menos 20 minutos de actividad cardiovascular, como bicicleta estática, tres veces por semana a una intensidad moderada, mientras que otro grupo sedentario solo recibía el control rutinario.

Para las que se ejercitaban establecieron que la actividad física debería ser aproximadamente la mitad de su capacidad aeróbica, es decir, que les producía una leve falta de aliento.

“Nuestros resultados demuestran que los bebés nacidos de madres físicamente activas tienen una activación cerebral más madura”

Después del parto, se evaluó la actividad del cerebro de los recién nacidos entre los 8 y 12 días después del nacimiento, por medio de electroencefalograma (EEG).

Utilizaron 124 electrodos blandos colocados en la cabeza del bebé y esperaron a que se quedara dormido sólo o en brazos de su madre. Midieron entonces la memoria auditiva de los neonatos por medio del potencial de disparidad (mismatch negativity), es decir, la respuesta eléctrica del cerebro observada en el EEG frente a diversos cambios de las características de un estímulo acústico.

Los bebés cuyas madres hicieron ejercicio mostraban una mayor respuesta a los sonidos medida en el EEG, lo que significa que tienen una memoria auditiva más eficiente. “Nuestros resultados demuestran que los bebés nacidos de madres físicamente activas tienen una activación cerebral más madura, lo que sugiere que su cerebro se ha desarrollado más rápidamente”, señalan los investigadores.

Los investigadores esperan que estos resultados animen a las mujeres a cambiar sus hábitos de salud, teniendo en cuenta que el simple hecho de hacer ejercicio durante el embarazo puede suponer una diferencia importante en el desarrollo cognitivo de los pequeños que podría suponer una ventaja para el resto de su vida.

Fuente: Noticias 24