Directamente irreconocible, así aparece la modelo Adriana Lima en el reportaje fotográfico de la revista Wicked, donde la vemos con el pelo corto y haciendo topless.
Las fotografías, además, han sufrido un tratamiento de contraste importante, además de que hay blogs en los que aseguran que ha sido retocada, inclusive para quitarle delantera (surrealista, de ser cierto).
Sea como sea, la modelo se lo pasó pipa haciendo este reportaje; Adriana juego con gatitos, se sube a las sillas, se disfraza, juega a desnudarse todavía más, huye perseguida por un hombre también disfrazado. Más que un trabajo parece un desbarajuste, pero ella bien que cobra lo mismo.
A decir verdad, es un reportaje fotográfico de lo más curioso, aunque no sería la belleza de Adriana Lima lo que se resaltaría, precisamente. Es más, la calidad de las imágenes tampoco van más allá del mero hecho de poner a una modelo en topless, super maquillada y hacerle hacer el chorra mientras le hacen las fotos, pero en fin, dos tetas tiran más que dos carretas, y si son brasileñas, ni te cuento…
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