NUEVA YORK (AP) – Una adolescente de padres venezolanos se convirtió en la esclava sexual del fundador de la
empresa American Apparel, soportando dos años de abusos graves, según una demanda judicial presentada en la Corte Suprema de Brooklyn.
Irene Morales trabajaba en el 2007 como dependienta en una de las tiendas American Apparel de Manhattan cuando Dov Charney, fundador de la exitosa cadena de venta de ropa, le dijo que quería mantener relaciones sexuales con ella cuando ésta cumpliera 18 años. En aquel momento, Morales tenía 17, según la demanda.
Charney llamó a Morales para decirle que fuera a su casa justo después de que ésta cumpliera los 18, en abril del 2008. Cuando Morales llegó al apartamento, Charney la recibió en ropa interior y la obligó a mantener sexo oral, asegura la demanda de 250 millones de dólares presentada por Morales.
La hispana fue obligada a permanecer varias horas en el apartamento y los abusos continuaron hasta mediados del año pasado, aseguran los documentos.
American Apparel emitió un comunicado el martes sin disputar las acusaciones, pero diciendo que cuando Morales dejó su trabajo, supuestamente firmó un documento que sugería que no demandaría a la compañía. Se estableció con ella que cualquier desacuerdo se solucionaría a través de un proceso de arbitraje, dijo la empresa.
«La empresa planea presentar una queja formal ante el estado de Nueva York para lograr una acción disciplinaria contra los abogados de la señorita Morales, quienes creemos están abusando del sistema legal para extorsionar dinero de American Apparel», indicó el comunicado. «El estatus de celebridad que tiene Dov Charney en el mundo de la moda está siendo explotado públicamente por los abogados de Morales a pesar del acuerdo de su cliente de iniciar un proceso de arbitraje confidencial ante cualquier disputa».
Eric Baum, abogado de Morales, respondió el miércoles diciendo que esas son «acusaciones irresponsables».
«Creemos que el acuerdo de arbitraje en este momento no es adecuado y no se puede llevar a cabo. Está diseñado tan sólo para silenciar a la señorita Morales», indicó.
«Creemos que el caso ha de ser escuchado por un jurado», añadió.
Charney ya ha sido demandado varias veces en el pasado por acoso sexual, pero nunca por una empleada que exige 250 millones de dólares.
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