Con la llegada de internet nuestra vida ha cambiado y día a día se convierte en la herramienta imprescindible

para el desarrollo de nuestras actividades cotidianas, desde ver el último acontecimiento en el planeta hasta encontrar el empleo de nuestros sueños, y todo sin la necesidad de salir de nuestro hogar.  

A su vez la red ha desarrollado también su lado comercial abriendose el mercado más extenso y global en el que somos capaces de pensar. La globalización y junto a ella la ley de la oferta y la demanda han permitido la posibilidad de acceder  a los bienes y servicios con el mejor de los precios imaginables. Pero frente a este avance ha surgido también el delito y la estafa por lo que es necesario tener en cuenta algunos consejos para salvaguardar nuestra seguridad:  

-En el caso de comprar a través de una página de clasificados a una persona física intenta siempre pagar contrareembolso o encontrarse personalmente con el vendedor en el caso de estar geográficamente cerca.

-Mantén actualizado tu explorador y antivirus para evitar los malware y spyware que utilicen tus datos indebidamente.

-Utiliza solo las páginas que contienen un sistema de pago seguro, es decir, código SSL (Secure Sockets Layer), lo que podrás comprobar porque aparece un candado en la barra del explorador junto a la dirección y por la página comienza por “https://” y no “http://”.

-Utiliza contraseñas complejas que contengan números, mayúsculas y minúsculas.

– Intenta realizar tus compras desde tu casa o la de un amigo. Las redes públicas como las de aeropuertos, estaciones o cafeterías suponen un riesgo mayor para tus datos.

– Conserva tu factura siempre para reclamar la devolución o la garantía en caso de insatisfacción o defecto.  

En colaboración con Liliana de Roloeganga