Venció en dos sets (7-5 y 6-3) a la alemana Anquelique Kerber


La actual número uno del tenis femenino logró hacerse con su séptimo título en Wimbledon tras vencer a la germana Kerber por 7-5 y 6-3 en una hora y 20 minutos de juego.

El primer set de la final fue muy parejo. La hermana menor de Venus Williams no cedió ningún saque y pudo quebrarlo recién en el 12º juego. Después de quebrar el saque, se apresuró para definir el parcial y presionó a su rival yendo a buscar a la red.

Anquelique Kerber, en tanto, se apoyó en su revés para intentar desestabilizar a la estadounidense haciendo que cometa errores no forzados en su tiro con dos manos de izquierda a derecha.

En el comienzo del segundo set, Kerber salió más agresiva, tratando de conseguir rápidamente el quiebre. Williams, por su parte, mantuvo el dominio del juego sacando a relucir su experiencia en finales.

Cerca estuvo la alemana de quebrar el saque de su rival cuando empataban en 3 games cada una, pero la efectividad de los saques (88%) de la número 1 del mundo se lo negó (13 aces).

Finalmente, en el octavo juego, la estadounidense de 34 años logró el break point tan esperado para ponerse 5-3 y jugar el sexto con su saque. El resto fue un trámite para que la defensora del título, con una volea de drive, vuelva a quedarse con el trofeo.

Con esta victoria, igualó a Steffi Graf en cantidad de Grand Slam ganados. Llegó a 22 y sólo queda por delante Margaret Court, la australiana tiene dos triunfos más pero se estima que Serena Williams, a pesar de su edad, pueda superarla y quedarse con el primer puesto, en un corto tiempo.