Observé con tristeza y estupor, después que me avisaron amenazaste que me darías »hasta con el tobo» en tu patética sección de farándula en LQEQ, donde luego de haber sido “el titular” como te jactabas, de un programa de farándula. ¡Para eso quedaste! pero ese no es el punto…Allá tú que aceptas que se te denigre profesionalmente de esa forma tan lamentable.

Digo que vi con tristeza y estupor tus tristes alegatos, sobre mi reportaje del domingo pasado, donde informé, que el canal para el cual trabajas -por ahora- le adeuda a tu excompañera del desaparecido programa “Los pepazos de La Pepa” dos meses de su salario. Verdad del tamaño de una catedral, que no pudiste desmentir.

Salí a la defensa de Karina Salaya y de otros empleados de dicha planta, como lo he hecho por muchos artistas a lo largo de mi paso por este diario. Es cierto que como tú, no poseo un titulo de periodista, ni tengo un diploma pegado a la pared. Pero más ética, profesionalismo y calidad humana que tú tengo ¡y mucha! y a las pruebas me remito.

Gráficas de la edición de Los pepazos de La Pepa que te causó tanta molestia… ¿Lo recuerdas?

Para todos es sabido que no tenías buenas relaciones laborales con tu excompañera y así lo demostraste de forma antiprofesional y poco caballerosa, en reiteradas oportunidades en el programa y lo declaraste en prensa. También es conocido hasta por los mismos gerentes y productores de ese canal, el “jalabolismo” a Venevisiòn, que a cada momento lanzabas con tus “criterios” comprados y “convenientes”. Hasta una amonestación recibiste por tus complacientes opiniones. ¿O no?

Miseria humana y pobreza artística

Ojala ese canal, te contrate y te pague de esa manera tu “lealtad” cuando salgas de pantalla de LaTele. Porque no se si lo sabes… ¡me imagino que si! que solo te ofrecerán un cargo como productor. A no ser que gracias a tu “oportuna” defensa, se olviden de todas tus burlas a parte de la nueva gerencia que ahora preside allí. Hasta en un programa de televisión mostraron las imágenes y la evidencia de tu desfasada participación. ¿O será que ahora si quieres y adoras al que llaman “El gordo bello”? ¡Muerde Aquí!

Otra de las tuyas…

Aún recuerdo cuando te hice la suplencia en tu desaparecido programa y otro día cuando lo repitieron, fuiste al canal y le gritaste a los productores Moisés Pérez y José Yánez, que por qué habían colocado esa edición al aire y no una con tú “imagen” ¡Cuidado con una vaina! “Él no trabaja aquí y el titular de este programa soy yo”

Gráficas de la edición de Los pepazos de La Pepa que te causó tanta molestia… ¿Lo recuerdas?

Ahora ni eres titular, ni eres nada. Solo un pobre jala bolas. En eso si tienes razón, cuando dijiste con tu dentadura más falsa que billete de quince, que “hoy estamos y mañana no” Eres tan falso que hasta hace poco me veías y me saludabas de abrazo y todo. Eres tan falso que hasta a mi programa de radio “La marimba farandulera” fuiste. ¡Eres tan patético!  A ti con razón te llaman el Judas de la farándula nacional. Eres tan malo de alma, que en cámara apuestas al fracaso de tus compañeros y dudas que Karina Salaya vuelva a la TV. ¡Qué pobre eres de espíritu!

Tan sencillo como eso…

Si LaTele no le debe a Karina Salaya, eso es fácil de comprobar y yo me retractaría. ¡Hazlo, demuéstrame que miento! Solo te reitero mi rechazo a tu triste ataque hacia mi persona, cuando nada de lo que allí escribí es mentira. Yo solo salí en defensa de una artista, como lo he hecho con varias figuras de la TV y como lo pude haber hecho contigo, si hubiese sido el caso. Y lo peor es que lo sabes, pero tú prefrieres vender tu dignidad, amor propio y ética, por seguir en pantalla. ¿Complaciente yo? ¿Mentiroso yo? ¡Muerde Aquí!

¿Qué te pasa Pedro Padilla? ¿Tanto desrizado japonés te quemó las neuronas? ¡Con cuenticos a mi no! Mira que yo me se historias y cuando tú vas por los mangos, ya yo vengo con la jalea.