La inconfundible y carismática voz del cantante británico Peter Gabriel conquistó el miércoles por la noche

al público de Caracas, primera etapa de una gira latinoamericana que le llevará en los próximos días a Perú, Argentina, Chile y México.

El ex vocalista del grupo Genesis, que había realizado un concierto en Caracas en 1993, ofreció a los caraqueños más de dos horas de sus grandes éxitos. «The rhythm of the heat» «No self control», «Darkness», «Steam», «Secret world» y «Down to Earth», nominada los Oscar este año como banda sonora original de la película «Wall-e», pusieron en pie al público congregado en el campo de fútbol de la Universidad Simón Bolívar.

«Ha pasado un tiempo, pero estamos muy felices de venir otra vez. Estamos empezando esta gira en el mismo lugar en donde terminamos el último tour que hicimos por Latinoamérica en 1993», explicó Gabriel, que leyó con dificultad varios textos preparados en español para la ocasión. A sus 59 años y con varias décadas de éxito a las espaldas, el músico mostró que su talento sigue intacto.

El show, inundado de efectos de iluminación y cálidos colores, puso a bailar hasta el más escéptico de los espectadores, sobre todo hacia el final del espectáculo donde el músico ofreció éxitos como «Red rain» y «Solsbury Hill».

La sorpresa de la noche fue la canción interpretada por la hija de Gabriel, Melanie, que hace los coros a su padre en esta gira. Discreto, Gabriel salió al escenario sin hacer ruido ni mirar al público y lo abandonó en silencio después de dos bises, interpretando emocionadamente uno de sus más grandes éxitos, «Biko», homenaje a Steven Biko, luchador contra el apartheid que murió asesinado en 1977.

AFP

Fotos: Santiago Nuñez

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