Patricia Velásquez, actriz venezolana, rechazó la tortura de un menor de edad perteneciente a la etnia Wayúu por parte de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) el pasado martes 16 de mayo en Maracaibo.

Velásquez aseguró sentir una «profunda indignación y dolor» ante los hechos.

«Hoy alzo mi voz, una vez más, no sólo para exigir la libertad de Venezuela si no también para manifestar mi repudio y denunciar al mundo la violación de los derechos humanos de un niño inocente de apenas 11 años.  Su error fue estar en el lugar equivocado para ver lo que ocurría y sin ni siquiera entender, justamente por su niñez el peligro que corría. La inocencia de este niño Wayúu fue destrozada. Esta acción enferma excede cualquier punto de la mente humana. Cuando se piensa en la tortura y represión solo son comparables a los que pasaron durante la segunda guerra mundial con los nazis», expresó la ex modelo en un video publicado en Facebook.

Velásquez recalcó que así como perpetró este hecho, existen «muchos casos peores». Por ello, realizó un llamado a quienes puedan hacer algo en favor de Venezuela.

 «Cuánto me duele mi país, aplaudo la valentía de todos y de quienes democráticamente se expresan en las calles o ayudan como pueden. Todos vamos hacia un mismo camino e incluyo a quienes estamos afuera, porque la libertad es para todos, sin distingo. Sigan adelante, sigan en las calles. No se cansen. Merecemos esperanza, paz y libertad», expresó.  

El niño

El pasado 16 de mayo Freddy González, niño wayuu de 11 años de edad, habló de lo ocurrido cuando fue torturado  por efectivos GNB.

El menor reveló que trató de correr para alejarse de los efectivos pero lograron alcanzarlo y lo amarraron con una tira. “Corrí muy rápido, pero yo no hice nada. Me quedé parado. Allí me agarraron, me golpearon, me amarraron con una tira y me tiraron una bomba en la espalda. Fueron los guardias nacionales”, señaló al diario La Verdad en presencia de la fiscal 35° del Ministerio Público.

Las declaraciones del joven fueron ofrecidas desde un centro médico de la ciudad donde fue atendido por las quemaduras de primer y segundo grado que produjo el artefacto en su espalda.