Se han librado de la tortura que suponía trabajar con una persona inestable, alocada, con serios problemas de

concentración, y va y les cae un actor que es muy bueno, muy centrado, pero que no es divertido. Eso es lo que dicen los compañeros de Ashton Kutcher sobre su incorporación a la comedia Dos Hombres y Medio.

Vale, que no es que Charlie Sheen sea mal actor, que no lo es, pero sus salidas de madre ponían en peligro toda la serie y creaban muy mal rollo en el plató. Pero él era majo y divertido, y hasta se echaban unas risas con él. Algo que, al parecer, no consiguen hacer con el nuevo actor del show.

La cosa es que, pese a que Ashton no es, definitivamente, Charlie, dudo mucho que los actores y el equipo técnico tenga muchas ganas de volver a la situación anterior. El recién llegado no les hará reir tanto, pero seguro que con él podrán continuar trabajando y pagar sus hipotecas. Que allí trabajan todos sobre obra realizada, y si no graban nuevos episodios, no hay parné para repartir.

El caso es que muchos de los ex-compañeros de Charlie opinan que el ambiente en los rodajes nunca será igual. Eso sí, si la ausencia del problemático actor les permite duplicar sus sueldos, tampoco van a quejarse y reclamar su vuelta. Una cosa que, aunque el muchacho haya deseado lo mejor para la serie en los Emmys, nunca va a pasar.

Así que, habiendo conseguido el pasado lunes, día del regreso a la parrila televisiva de la serie, más de 27 millones de espectadores, sea Kutcher aburrido, soso o la alegría de la huerta, me da que se va a quedar por allí bastante tiempo. Para alegría de los bolsillos de sus criticones compañeros.

Vía | www.thesuperficial.com