La banda más internacional de Venezuela se presenta el viernes 24 de

agosto en el Auditorio Nacional de la capital mexicana para celebrar sus 21 años de carrera.

Los Amigos gozan de un importante reconocimiento en el mercado mexicano. Por ello, y tras llenar varias veces -en 2010 y 2011- el también capitalino Teatro Metropólitan, su manager, Jesús Noriega, consideró que el momento ya era oportuno
para atreverse a una presentación en un espacio más grande en la Ciudad de México. «El DF mexicano es una de las plazas más importantes para la agrupación. Luego de hacer tres Metropólitan que resultaron ‘Sold Out’, consulté a nuestros promotores aliados en México cuál podría ser un ‘venue’ ideal, con mayor capacidad, para festejar los 21 años invisibles. Sin dudarlo, nos propusieron hacer un primer Auditorio Nacional. Casi enseguida comenzamos los preparativos», dijo Noriega.

El Coloso de Reforma, como es llamado de manera informal en el medio del entretenimiento, suma 60 años de historia, su inauguración oficial ocurrió en el año 1952. Las importantes revistas especializadas Pollstar y Billboard lo reconocieron como mejor recinto internacional para espectáculos.

El concierto del próximo viernes significa más que un paso importante en la carrera del sexteto venezolano, así como en la de cualquier artista que allí se presenta: los consolida como artistas reconocidos en México con proyección mundial.  Antes que los seis caraqueños que hicieron de su ‘Gozadera’ una marca que los distingue, otros coterráneos, como las agrupaciones Uff y Los Chamos o el músico Franco de Vita, pisaron el famoso escenario. Lo hicieron también The Doors, Prince, George Michael, Shakira, The Cranberries, Celine Dion, Roberto Carlos, Juan Gabriel y Julio Iglesias, entre muchos otros grandes de la música.

José Rafael Torres, bajista invisible, no siente miedo por la cantidad de público que puede albergar El Coloso, once mil personas, porque sabe que la gente que va a verlos los viene acompañando hace mucho y va con el fin, como ellos, de pasarla bien. «Vamos dispuestos a gozar», advierte. Si acaso, lo que podría inquietarlo un poco es que el show salga bien, que no ocurra alguna falla técnica. Un poco, porque para él el equipo invisible es como el Barça: «Salimos a matar. Nos expulsan a dos y goleamos igual», asegura entre risas.

Para estar a la altura de este importante recital, Los Amigos Invisibles se preparan: «Estamos haciendo sentadillas, flexiones, abdominales. Entrenándonos para el show», aseguró el ‘frontman’ Julio Briceño recientemente en entrevista con la conocida cadena de noticias CNN. Fuera de cámaras y en confianza, confiesa: «Es mentira, no estamos haciendo abdominales. En realidad, estamos preparándonos más mentalmente que otra cosa. También hemos estado toda la semana haciendo promoción para el show».

Briceño siente y agradece el apoyo de los medios mexicanos a la carrera invisible: «Ha sido muy bonito porque hemos podido sentir de cerca el cariño de los medios que vienen siguiendo nuestra carrera en todos estos años acá en México. Más que solo divertirse con las letras de nuestras canciones, nos han manifestado el aprecio por la banda, por su música, que consideran de calidad. Eso es muy lindo de escuchar».

Más allá de la jocosidad que los caracteriza, el grupo entiende la responsabilidad que implica convertirse en uno de los artistas que logra llegar hasta este espacio. Lo hacen cargando en sus espaldas 21 años de trayectoria, seis discos de estudio (el séptimo viene en camino), tres nominaciones a los Premios Grammy y otras tres a los Grammy Latinos -uno de los cuales se llevaron a casa-  más de 60 países visitados y un concierto-documental financiado en su totalidad por sus fans alrededor del mundo: «La Casa del Ritmo. A Film About Los Amigos Invisibles» (Javier Andrade. Ecuador/EE UU, 2012).

«Cuando comenzamos a venir a México, no sabíamos si íbamos a calar en el gusto de la gente. No veía que la banda pudiera tener un Auditorio Nacional, lugar que se ganan los artistas a pulso. Me parecía un imposible. Me equivoqué, sí, pero me doy cuenta también de que nunca dejamos de trabajar para que algo así pudiera ocurrir. Estamos muy emocionados. Será una noche de esas inolvidables en la que se dará todo. Sabemos que nos irá a ver gente que nos viene siguiendo desde hace mucho tiempo y sienten que esa noche es de ellos tanto como nosotros», relata y anticipa el frontman.

«El Auditorio Nacional de México vendría a ser el equivalente, en Venezuela, del Teresa Carreño y el Poliedro, juntos, y del Madison Square Garden, en Estados Unidos. Nosotros tenemos toda la vida viniendo a México. Siempre que pasamos  frente al Auditorio decíamos: ¡’Wow’, cómo será tocar ahí! Que Los Amigos lleguen a él es definitivamente un logro», asegura Torres.

www.amigosinvisibles.com
twitter.com/AmgsInvisibles
facebook.com/losamigosinvisibles