
La cantante alcanza cotas inigualables de transgresión en alguno de sus posados, como el que protagoniza junto a un esqueleto, al que le pasa la pierna por encima. El esqueleto, sin embargo, no parece inmutarse, como era de esperar.
Otro de los llamativos y siniestros posados que muestran el cuerpo de la cantante casi desnudo la sitúa en un cementerio virtual, lleno de cruces y dominado por el color negro, sólo roto por el tono de su piel y el blanco de su cabellera y sus colmillos de vampiresa.
Lady Gaga siempre se ha caracterizado por no tener ningún pudor a la hora de enseñar su cuerpo y se ha mostrado en varias ocasiones muy ligera de ropa, como en su noche de sexo, violencia y alcohol en Ibiza o en su vídeo prohibido ‘Lovegame’.