La inspiración puede llegar en cualquier momento. Pero LA MALA RODRIGUEZ está convencida de que la tranquilidad del fregadero
de su casa la ayuda a atraer los »fantasmas» que le dictan melodías y canciones.
«En el lavadero me la paso muy bien. Cuando estoy lavando la ropa, doblando la ropa (me inspiro)», manifestó LA MALA en una entrevista realizada el martes en una conocida casa de guitarras de Miami. «Me gusta porque me siento sola, y es ahí cuando normalmente me vienen los fantasmas y me dicen las cosas», expresó la cantautora andaluza.
Lejos de las luces de los escenarios, de los ruidos y las multitudes, la artista de 31 años disfruta de la simplicidad de su casa y de las tareas domésticas. «Me parece que cuidar de tu entorno es lo mejor que hay y no hay nada como valorar eso mismo, el hacer un café, el preparar una comida y que la gente que la coma diga ¡qué rico!, o tener linda tu casa», manifestó LA MALA. También aseguró que su más reciente álbum, DIRTY BAILARINA, representa un cambio con respecto a sus tres discos anteriores.
El nombre del disco, producido por DJ Griffi y Focus, evoca a una persona que se ensucia haciendo su arte, explicó. «La bailarina, tan bella y exquisita, con toda esa suciedad, que quieras o no nos rodea siempre en algunos momentos», explicó RODRIGUEZ, que en la portada del álbum aparece sentada como mirándose a sí misma, hacia abajo. La producción debutó en marzo en España, se lanzó a finales de septiembre en Argentina, Colombia y México y llegó a Estados Unidos en octubre de manera digital. Está postulada al Latin Grammy al mejor álbum urbano y su tema NO PIDAS PERDÓN a mejor canción urbana.
