Juan Carlos Blanco hace balance


El presidente de la Liga destaca que no hay equipos favoritos entre los seis que compiten y que la veteranía o juventud no son un indicador para adelantar resultados.

Caracas 07/09/2015.-  La virtud de la Liga Venezolana de Voleibol Femenino es que es un torneo signado por la paridad. Entre sus seis equipos existen similares condiciones de alzarse con el título, sin que uno presuma sobre los otros el peso de un favoritismo por razones de títulos ganados o experiencia de sus jugadoras.

Para Juan Carlos Blanco, presidente de la LVV, estas razones tienen su comprobación en los resultados luego de dos fines de semana de competencia, como el caso de las juveniles de Guerreras, quienes supieron barrer en Apure a las muchachas del Deportivo Anzoátegui, y dividir con Vikingas en la cancha de las mirandinas.

El abolengo de dos títulos de campeonas no salvaron al Aragua Voleibol Club de ser barridas en la serie de estreno de su nueva sede, el Gimnasio Rafael Romero Bolívar, pero las maracayeras pudieron redimir su tropiezo con par de victorias en la segunda semana, gracia a las muchas oportunidades que concede el deporte.

Este abanico de situaciones le imprimen a la liga el aliciente de ser un torneo competitivo y la oportunidad de experimentar fórmulas deportivas y organizativas innovadoras, como el caso de Académicas de Caracas, que además de estar invictas en la cancha y de postular a la primera jugadora más valiosa de la semana (María José Pérez), cuentan con un equipo gerencial interesante que consigue buenos resultados.

La veteranía de las jugadoras tampoco es la garantía de pasar el rodillo con las rivales. El caso de Vikingas es elocuente, ya que a pesar de la experiencia, no pudieron descifrar el modo de contener la irreverencia de las apureñas, quienes las bajaron rápido del caballo de las invictas en la serie que disputaron este fin de semana.

Mientras tanto, las del Deportivo Anzoátegui parecen estar padeciendo el problema de haber empezado tarde la preparación del torneo, con cuatro derrotas en la carretera, con lo que volver a Puerto La Cruz parece ser la alternativa más inmediata para retomar el foco de una Liga que para su suerte apenas empieza.

Igual sucede con Bucaneras de La Guaira, que han perdido sus cuatro partidos y figuran últimas sin puntos, con solo dos sets ganados de doce que han disputado.

Desde la perspectiva de Juan Carlos Blanco, esta situación inicial de los equipos irá variando a medida que todas tomen más ritmo y en la que la situación de la competencia obligue a conseguir resultados que les permitan avanzar a las instancias superiores que les acerquen a  la gloria de la Copa CANTV-MOVILNET.

Fotos prensa LVV