Una de las diferencias que detonaron que Katy Perry y Russell Brand se separaran es porque él se sentía menos que ella… además de que no le gustó que la artista se juntara con Rihanna, por su agitado ritmo de vida.

De acuerdo con información publicada por TMZ, amigos de la intérprete de «Firework» dijeron que al comediante le dolió todo lo que ella logró en su carrera durante los 14 meses que duró el matrimonio.

Según versiones, el actor asistía a las entregas de premios pero se iba antes que la estrella del pop, quien siempre acaparaba más la atención de los medios que él.

Otro aspecto que le criticó siempre fue el de sus amistades, sobre todo de Rihanna, a quien se le conoce por llevar un estilo de vida desenfrenado.

Brand, quien está recuperado de su adicción a las drogas y al sexo, también reprobaba que Perry tomara alcohol, como lo hizo durante una fiesta que tuvo en Rio de Janeiro, cuando la captaron bailando de manera sugestiva con uno de sus bailarines.

Según TMZ, la cantante, de 27 años, no quería solicitar el divorcio porque va en contra de su fe, pues su familia es cristiana.

Sus padres, Keith y Mary Hudson, le dieron públicamente la aprobación a su hija antes del matrimonio, a pesar de los controvertidos antecedentes de Russell. Incluso su papá, quien es pastor, dijo que comprendía al actor.

«Todos tenemos un pasado. Yo viví en la época de Jimi Hendrix y Janis Joplin y solía consumir LSD», declaró en su momento.

El portal informó que la pareja acordó separarse unas semanas y que entablaría el divorcio una vez que los dos estén fuera de Estados Unidos.