Madrid, España. Entregada a un público cada vez menos adolescente, la banda madrileña El Canto del Loco reivindicó esta noche en la capital de España su «chulería madrileña» en un concierto que iluminó a casi 15.000 seguidores con un espectacular juego de luces y con el cálido «Hasta luego» que da nombre a su gira.
El grupo liderado por Dani Martín se entregó a un Palacio de los Deportes madrileño abarrotado, que volverá a estarlo mañana con todas las entradas vendidas, y celebró sus diez años de trayectoria con el anuncio de dos nuevos discos que saldrán a la venta el próximo 24 de noviembre.

«No sale un disco, salen dos, porque somos así de chulos y porque somos de Madrid», dijo Dani cuando llegó el momento de tocar Quiero aprender de ti un tema inédito que sonó por primera vez en Madrid y que los «locos» grabaron recientemente en Argentina.

El Canto del Loco se sintió, una vez más, en su propia casa, en un recinto que conoce bien y en el que además de dos horas y media de música ofreció un diálogo lleno de agradecimientos, diversión, risas y alguna que otra ironía: «De fútbol mejor no hablamos, pero ni vosotros ni yo», exclamó Dani, fiel seguidor del Atlético de Madrid.

Con la emotiva cuenta atrás que da inicio a sus conciertos, El canto del loco entró en escena con La suerte de mi vida tras una jaula de pantallas que hizo vibrar el Palacio con rayos y truenos y que proyectaría cielos estrellados, puestas de sol, portadas de discos de vinilo, besos e innumerables juegos gráficos que dieron luz y reflejos a un público incansable.

Un público enloquecido por grandes éxitos como Son sueños, Puede ser, Volverá o Besos, que no dejó de saltar en ningún momento, gritó, dio palmas hasta la saciedad y se descalzó con Zapatillas.

El líder del grupo no se las quitó, a pesar de cambiar su camiseta por una americana, una muestra de que a sus 32 años, ya no puede ser Peter Pan, como tampoco lo son muchos de sus fans.

Pero eso no le resta ni un ápice de energía ni ganas de sorprender a sus seguidores, a quienes pedía «ruido, mucho ruido», «silencios», «palmas» y, sobre todo, «chulería».

Los espectadores revelaron su propósito con «Volver a disfrutar», toda una demostración de que si Dani Martín, David Otero y Chema Ruiz pueden tocar veintisiete canciones sin parar, su público puede bailarlas e incluso improvisar la letra, con lo que el líder de la banda no pudo evitar reírse.

Con Isaac Miguel en el teclado, Carlos Gamón en la batería -desde que Jandro Velázquez dejara el grupo hace un año- y con la ayuda de esas originales proyecciones, los «locos» de Madrid vibraron y se rindieron ante esa chulería que no olvidó la sensibilidad con uno de los bises, Cicatrices, dedicada «a todos los que se sienten pequeñitos». «Me cago en los que van de valientes», rugió Dani.

Después de su próxima actuación en Madrid, El Canto del Loco cerrará en Barcelona, el próximo 19 de diciembre, una gira que confirma que el público de su pop-rock espera que ese «Hasta luego» regale pronto nuevos conciertos.