La vida de Demi Lovato no está siendo precisamente sencilla últimamente. Aparte de los problemas que la han llevado a
buscar ayuda médica, la actriz tuvo que ver cómo su ex Joe Jonas comenzaba una idílica relación con Ashley Greene. Pero la joven no se quedó de brazos cruzados, y en un encuentro con Greene le dejó muy claro lo que opinaba de ella por haberle quitado a Jonas.
Demi Lovato y Joe Jonas eran buenos amigos hasta que empezaron a salir juntos. Tras un corto noviazgo -al que puso fin Jonas- ambos han continuado su amistad, pero a la joven le costó mucho recuperarse de la ruptura. «Perdió la cabeza. No sabía en quién confiar. Se culpaba de la ruptura», afirman fuentes de Showbiz Spy.
Mientras que la joven se lamentaba e intentaba superar el haber perdido a Jonas, el cantante rehacía su vida sentimental con Ashley Greene, comenzando una relación que los medios representaban como idílica.
Así, a Demi no le resultó nada fácil contener su rabia hacia Greene. La artista y Joe Jonas se embarcaron en una gira musical juntos, y la nueva novia del cantante solía acompañarles para pasar tiempo junto a Jonas. Algo que no hacía ninguna gracia a Lovato.
«Tener a Ashley alrededor todo el rato volvía loca a Demi», explican fuentes de este mismo medio. Así que finalmente, la joven explotó y le dejó muy claro lo que pensaba de ella.
«En uno de los shows Demi tenía a Ashley cerca y perdió la cabeza», continúa esta fuente. «Le daban rabietas por no haber podido recuperar a Joe».
Y es que aparte de quedarse sin novio, Demi Lovato se encontraba atravesando otro tipo de problemas que finalmente la llevaron a buscar ayuda médica. Tal fue la situación, que incluso Ashley Greene tuvo que aclarar que no tenía nada que ver con el mal estado de salud de la joven.
Según el propio representante de Greene, «no hubo ningún problema entre Ashley y Demi». «Jonas y Greene no tuvieron nada que ver (con los problemas de Demi). No están relacionados con ello», añaden fuentes de la revista People.
