Tras competir con miles de experimentados actores de teatro musical por el estelar de la puesta en escena «El Rey León»,

Carlos Rivera se quedó con el protagónico; era la primera vez que un artista mexicano encabezaría el elenco de una obra de Disney en su arranque en la Península Ibérica.

El impacto fue inmediato: felicitaciones del mundo entero a los productores y directores del musical, reseñas alabando la voz y presencia de Rivera, gente de otros países llegando a España para ver este gran espectáculo y sobrecogerse con la interpretación de Carlos, entrevistas, reportajes e invitaciones a los máximos eventos de la sociedad española, en pocas palabras, «un mexicano triunfando en el extranjero».

Más allá de todas las obras en las que ha intervenido tanto en su natal México como en el extranjero, ver y escuchar a Carlos en un concierto constituye una gratísima experiencia, conecta con el público, transmite y conmueve, provoca que como latinos nos sintamos orgullosos de contar con un artista tan bueno y con tan promisoria carrera por delante.

«El hubiera no existe»

Así se titula su nuevo discompacto, el tercero en su carrera. Con sus dos anteriores producciones discográficas, «Carlos Rivera» y «Mexicano», obtuvo en ambos casos el reconocimiento de Disco de Oro por sus altas ventas; sin embargo, ahora la exigencia es mayor, primeramente porque como artista ha evolucionado en todos sentidos y en segundo lugar porque se han escogido temas y autores cuyas canciones combinan naturalmente con la personalidad y voz del carismático artista.

Una bocanada de aire fresco y un sonido contemporáneo se aprecia en todo el disco, el cual se encomendó a dos de los productores más importantes de la actualidad: Armando Ávila de México y Manuel Illán de España. En cuanto a compositores, sobresalen Mario Domm, Franco De Vita, Leonel García, Pablo Preciado y el propio Carlos Rivera, quien incursiona con destreza en este rubro. Así es como Carlos Rivera presenta su nuevo trabajo discográfico, que lleva etiqueta Sony Music, con un crecimiento importante tras de sí, con la experiencia de imponerse en otro país pero sin olvidarse del propio, su México, siempre su querido México.

Venezuela lo recibirá próximamente y seguro el mismo fenómeno que ha ocurrido con él en otras latitudes, como por ejemplo España, seguro las repetirá en nuestro país. Las expectativas y las condiciones están dadas @diegokapeky