Además denuncia la discriminación racial que se produce en Hollywood, donde «hay estupendas latinas que no tienen oportunidad alguna debido a su origen».
Por otra parte, la protagonista de «Ghost Rider» y «The Spirit» comenta, no sin sorna, su experiencia con el realizador alemán Werner Herzog durante el rodaje de «Bad Lieutenant», su último filme.
«Fue una experiencia amarga», explica la actriz sobre el trabajo con Herzog, ya que -relata con ironía- «no hubo ataques de ira, gritos ni caprichos locos. Casi resultó aburrido».
Finalmente comenta que para prepararse para su papel de prostituta de lujo «me cité con ‘callgirls’ que reciben a sus clientes en apartamentos de lujo. Así aprendí muchas cosas».