En mi carácter de manager del actor venezolano Adolfo Cubas, quiero hacer del conocimiento público mi posición en relación al caso Ricky Martín-Adolfo Cubas, el cual ha tenido y tiene al mundo del espectáculo

, tanto nacional como internacional, pendiente de este escándalo. Quiero fijar posición en torno a esto, ya que he recibido infinidad de llamadas y comunicaciones de parte de amigos y conocidos en común, tanto de la parte de Ricky Martín como de la de mi representado, además de los periodistas que cubren la fuente de espectáculos, tanto en Venezuela como en el exterior.

Hago público mi total desacuerdo en la manera en que algunos medios de comunicación de nuestro país han manejado esta información, ya que el escándalo fue desatado por la publicación de una información en un diario nacional, en la cual se afirmaba que el actor Adolfo Cubas había mantenido una relación con Ricky Martin, lo que a su vez generó la falsa y penosa información sobre la supuesta participación de Cubas en un conocido programa de la televisión española. Por tal motivo, la prensa nacional publicó diversas informaciones acerca de que mi representado se aprovechó del cantante Ricky Martin, para sacar beneficio económico y obtener notoriedad pública de todo esto. Desmiento categóricamente este hecho, ya que si la intención inicial hubiese sido esa, la opinión pública nacional e internacional no se hubiese enterado de todo esto por medio de una simple nota publicada en un diario nacional, sino a través de la participación de mi representado en el mencionado programa de la TV española, la cual sí le habría reportado a mi representado una jugosa ganancia económica.

Responsablemente también debo decir que, así como no estoy de acuerdo en la manera como la prensa nacional ha manejado este caso, tampoco estoy de acuerdo en cómo mi representado Adolfo Cubas lo ha hecho. Considero que Cubas no ha sabido manejar una situación tan delicada como ésta, lo que a mi entender, en lugar de reportarle beneficios económicos como muchos creen, sólo ha servido para perjudicar su carrera artística.

Quiero destacar que me enteré de este caso a través de la televisión, e inmediatamente me comuniqué con mi representado, quien me informó que desde Miami se le propuso ir a España a contar su verdad. Es algo completamente normal, tanto en Estados Unidos como en Europa, que escándalos de esta magnitud se ventilen en televisión. No es el primer caso ni será el último. Sin embargo, aquí en Venezuela se ha tratado de criminalizar el hecho, especulando acerca de que supuestamente Adolfo Cubas iba a cobrar una alta suma de dinero, a costa de la destrucción de la imagen de su ex amigo Ricky Martin.

Ya es costumbre que la mayoría de los llamados personajes famosos negocien su vida privada, tal como lo vemos a diario en la prensa internacional. Puede gustarnos o no, pero todos sabemos que eso ocurre. Sin embargo, aquí en Venezuela se ha pretendido crucificar al actor Adolfo Cubas por hacer mención de su amistad con Ricky Martín. Pero, me pregunto, qué hubiese pasado si es Ricky Martín quien hace referencia a Adolfo Cubas? Cuál hubiese sido la reacción de la prensa venezolana?

Cabe destacar que si Cubas se hubiese querido aprovechar de la imagen de Ricky Martín, lo hubiese hecho ya hace mucho tiempo, cuando el cantante boricua obtuvo la fama internacional que lo convirtió en un ídolo mundial.

Cuando afirmo que no apoyo al actor Adolfo Cubas, lo digo con total responsabilidad y asumiendo las consecuencias. No lo apoyo ni lo apoyaré, porque considero que ha cometido un grave error, y como tal, tiene sus consecuencias. Quiero dejar bien claro que, como muchos han insinuado, no estoy “haciendo leña del árbol caído”. Mi representado no es leña ni el árbol está caído… Muchos medios se han dado a la tarea de decir que Adolfo Cubas es un actor de segunda y que sólo busca la fama. Y yo les pregunto: 20 años de carrera artística, el haber tenido el privilegio de participar en las novelas más exitosas de la televisión venezolana y el haber compartido rol con las figuras femeninas de mayor proyección internacional, lo convierten en “un actor de segunda”? Tener el renombre que tiene en el medio y la fama de la cual goza en su país, se lo ha ganado a fuerza de trabajo y disciplina. El hecho de haber realizado novelas en Estados Unidos, Argentina, Ecuador y Colombia habla mucho del talento del actor (el mismo que ahora se le ha pretendido desconocer) y es lo que le ha permitido merecerse su fama y su título de excelente actor.

No apoyo a Adolfo Cubas en esta oportunidad porque sé y estoy convencido de que su decisión de ventilar cosas de su vida privada en este momento no era conveniente. Nadie mejor que él sabe que lo he apoyado en toda su carrera profesional e, incluso, personal. Le he brindado mi total apoyo en cada momento importante de su vida, como lo fueron cuando sufrió el accidente automovilístico al salir de grabar la telenovela “Cara sucia”, durante la etapa de su divorcio y cuando tuvo que someterse a una delicada operación cerebral.

Finalmente, deseo informar a la opinión pública que Adolfo Cubas no ha dado declaración oficial con respecto a este caso a ningún medio de comunicación escrito, radial o televisivo. Al tratarse de un asunto de su vida privada, el mismo actor será quien tome la decisión de cuándo contar su verdad ante los medios de comunicación.

José  Verdalles

Manager Artístico