Justin Timberlake hizo su regreso triunfal al mundo de la música en la entrega 55 del Grammy.

El cantante fue de los primeros en llegar a la alfombra roja y así poder prepararse para su gran noche después de estar ausente por seis años de la música y estar enfocado en el cine.

Ellen DeGeneres y Beyoncé fueron las celebridades que lo introdujeron al escenario y en donde hubo bromas entre ellas además de emoción por querer que Timberlake se presentara y cantara lo más pronto posible.

Acompañado por una orquesta llamada ‘JT and the Tennessee Kids’ y cantando su primer sencillo ‘Suit & Tie’, Justin se hizo acompañar por el Rey Midas del hip Hop, Jay-Z.

Justin hizo lo que mejor sabe hacer: cantar, bailar y divertirse como siempre a la hora de cantar.

Además de cantar ‘Suit & Tie’, Timberlake debutó otra canción de su más reciente álbum ‘The 20/20 experience’, ‘Pusher Love Girl’.

Más maduro, con mejor producción y con canciones que evocan el estilo clásico del jazz con un toque de pop, Justin Timberlake gozó de su regreso a los grandes escenarios y se dice que con su más reciente álbum preparará una gran gira mundial.

Atrás quedaron los años del ‘Mickey Mouse Club’, las coreografías elaboradas de ‘N’SYNC’ y mejor démosle la bienvenida nuevamente a Justin Timberlake que sí, regresó más sexy y más musical que nunca.