Al actor de televisión, cine y modelo se le obligó a entrar en su vehiculo y fue “ruleteado” por seis horas por toda la ciudad y amenazado de muerte,

si seguía demostrando su inconformidad con el actual gobierno

No solo la persecución política va dirigida como su nombre lo dice a los políticos, también a ciudadanos comunes, incluso a los artistas, ya que estos se han convertido con la polarización que existe en Venezuela y que ha penetrado de la misma forma y contundencia al medio de las bambalinas y el arte, en voceros tanto del gobierno, como de la oposición. Los artistas ahora no solo son artistas, se han convertido en comunicadores de una realidad que sucede en el país a diario, unos a favor y otros en contra. Válido en un país que se dice ser democrático, aunque los hechos lo pongan en duda. Lo peligroso ahora es que se ha creado una especie de vandalismo mediático, para amedrentar a quién piense diferente.

El preámbulo lo hago, porque el pasado 06 de abril al actor de televisión, cine y modelo César Suárez, actualmente participando en la novela “Los secretos de Lucía” que graba Venevisión, fue secuestrado saliendo del gimnasio a donde asistía todas las noches ubicado en el sector Los Campitos al este de la ciudad de Caracas. Al histrión quien participó en novelas de la desaparecida RCTV como: La cuaima, La mujer de Judas, Estrambótica Anastasia y Negra Consentida entre otras, se le obligó a entrar en su vehiculo y fue “ruleteado” por seis horas por toda la ciudad y amenazado de muerte, si seguía demostrando su inconformidad con el actual gobierno.

Se fue de Venezuela

Pudimos conocer de manera exclusiva, que Suárez luego del lamentable hecho ocurrido, se fue del país. Estuvimos días tratando de localizarlo y finalmente pudimos hablar con él, para que fuese él mismo quien corroborara la información.

-¿Es cierto que sufriste un secuestro?

“¡Sí! Lamentablemente es cierto. El día 06 de este mes, salía del gimnasio y dos sujetos me amenazaron con armas de fuego. Entramos a mi vehiculo y allí me amedrentaron y golpearon”.

-¿Te robaron tus pertenencias?

“No se llevaron nada. Solo me amenazaron y me dijeron que si seguía escribiendo en mi cuenta en Twitter, comentarios en contra de voceros del gobierno, me matarían. Me dijeron que ya saben donde vivo y trabajo y que me seguirían los pasos. Me ‘aconsejaron’ que me uniera al proceso, porque de lo contrario me quedaría sin empleo”.

-¿Por qué te fuiste del país y no colocaste la denuncia?

“Fue traumática para mi la situación que viví, pensé que ese día me matarían. Estuve seis horas con ellos que me resultaron interminables. El día 08 de abril viajé a Miami y me dolió no ejercer mi derecho al voto, pero tenía la esperanza que todo cambiaría y poder regresar tranquilo a Venezuela. Pero no ocurrió así”.
 

-¿Cómo hiciste con la novela, ya habías finalizado tu participación?

“Me fui dejando el proyecto, en el cual tengo un personaje y hablé con producción. Pensé que podría volver y terminar mi compromiso con el canal después de las elecciones, pero los resultados fueron adversos a lo que yo creí que iba a pasar y que por lo visto pasó…”

-¿Qué crees tú que haya sido el detonante de tu secuestro?

“Fui y seguiré siendo un opositor crítico de lo que sucede en mi país. Dije lo que sentía y lo que pensaba. Existen personeros del gobierno que son más ofensivos y no pasa nada y la ley debe ser y funcionar para todos por igual, pero en mi país eso no sucede así lastimosamente”

-¿Vas a volver a Venezuela?

“¡Claro! Es mi país, soy venezolano y tengo todo el derecho de estar en mi patria. Hablo contigo hoy porque quiero dejar un precedente y pedir, más bien exigir, que se deje de amedrentar a las personas solo por pensar diferente. Todos somos venezolanos y tenemos el derecho de opinar y exigir una mejor calidad de vida. Los políticos son servidores públicos y es la obligación del gobierno, brindarnos seguridad, así seamos críticos a su régimen. Eso es democracia y nosotros vivimos en un país democrático”

-¿Qué aprendizaje te dejó  esta dura experiencia?

“Soy venezolano, he representado a mi país como modelo y actor. Me siento orgulloso de ser venezolano y quiero, merezco y merecemos todos un país mejor, lleno de oportunidades, sin exclusiones, con seguridad, calidad de vida, servicios públicos de primera, bienestar social. Creo en Dios y en la justicia divina. En nuestro trabajo el artista miente para mostrar una verdad, el político para esconderla»